MIGRACIÓN EN LATINOAMÉRICA

A mediados de la década de los 80 Latinoamérica experimento un aumento migratorio. Debido a la inestabilidad política producida por las dictaduras militares de los años 70´s, las guerras civiles de Centro América en los 80´s, la implementación de la economía de libre mercado en los países que conforma Latinoamérica, quebrantando el bienestar social y disminuyendo el rol del Estado, lo que ha acarreado un aumento de la pobreza, un deterioro y un estancamiento de la calidad de vida en gran parte de la personas de los países de latinoamericana, eso se ve reflejado sobre todo en los sectores más desprotegidos, lo que ha generado un aumento de las brechas sociales entre ricos y pobres.

Este panorama provocó un cambio en lo que a migración se refiere en Latinoamérica, ya que de ser una región receptora de migración durante el siglo XIX y parte del siglo XX, pasa a ser emisora de flujos migratorios, hay que destacar que algunos países se convirtieron tanto en receptores como emisores de migrantes, planteando nuevos desafíos para afrontar esta realidad tanto del Estado receptor como del emisor.

El flujo migratorio de un país a otro a punta a la búsqueda de mayor estabilidad política y principalmente económica, esto se ha visto reflejado en los flujos migratorios que van a países de Europa occidental y/o a Estados Unidos. Es debido a este aumento migratorio que dichos países implementan políticas migratorias, restringiendo así la cantidad de gente que puede llegar o no.  

Esto ha provocado que los flujos de migrantes busquen otras alternativas dentro de la misma Latinoamérica, indicando como focos de emigración a Chile y Costa Rica.

Las cifras indican que cerca del 3.4 % de los migrantes del mundo, aproximadamente 5.9 millones de personas residen en América Latina. Países como Argentina, Brasil y Venezuela han sido históricamente receptores de migrantes, pero actualmente también se han convertido en emisores.